Lamento enormemente la decisión de condenar a muerte a quienes graban video en forma vertical, pues bastante desgracia tienen ellos al haber nacido con un ojo encima del otro.
Pero debo acatar la decisión de la mayoría. Ahora solo nos queda acordar a qué torturas crueles someteremos antes de la ejecución a los que además los convierten después a formato horizontal, añadiendo un rectángulo negro a cada lado.